“-¡Mirá cómo quedó el árbol...!”, exclama una vecina, tapándose la cabeza con las manos. “-Es un crimen lo que hicieron”, opina otra. La poda del gomero de la avenida Mate de Luna y pasaje Cervantes generó malestar en la sociedad tucumana, tanto que las notas de nuestro diario y de la Sociedad Amigos del Árbol fueron replicadas y compartidas por numerosos lectores en las redes sociales. Aunque se frenó la tala, el ejemplar, emblema de la zona, quedó destrozado.

“Me desperté el martes con el ruido de las motosierras. Salí de casa y vi que estaban cortando ramas grandes del gomero. Les pregunté a los municipales por qué estaban haciendo eso, y sólo recibí insultos y amenazas de su parte”, se quejó un vecino, que prefirió no dar su nombre. El hombre contó que cuando estaba haciendo el reclamo, se le unieron otros vecinos de Ciudadela, que viven a tres cuadras de la avenida Mate de Luna. “Cuando le digo a la gente dónde vivo me dicen: -¡Ah el pasaje del gomero gigante! Es símbolo de Ciudadela. No pueden sacarlo. Es como pretender erradicar el San Antonio de la Escuela Sarmiento. Una locura”, denunció, indignado.

Sin embargo, todavía hay quienes quieren que el pasaje Cervantes esté libre del amparo y sombra del gomero. Los vecinos que presentaron la nota a la Municipalidad para que la dirección de Espacios Verdes erradique el árbol insisten con esa idea. “El árbol de noche es un refugio de malvivientes. Siempre encuentro el cantero con botellas de vino”, expresó María Dolores Rodríguez.

Gastón Guerra, el empresario que se mostró molesto cuando se decidió frenar la poda, contó que no apoyó la erradicación del árbol entero sino la poda de sus ramas más frondosas así como el corte de las largas raíces que, según denuncia, rompen las cañerías de las casas lindantes.

“Nuestro plan era reconstruir el cantero que rodea al árbol y parquizar la zona además de iluminarla. De hecho, hace dos meses colocamos reflectores para alumbrar el pasaje pero no son suficientes. La calle de noche es impenetrable y muy peligrosa”, explicó el hombre, que alquiló un local comercial en esa esquina para poner una concesionaria de autos.

Con respecto a los problemas que su obra tendría con los permisos correspondientes para construir, Guerra aclaró que está terminando los trámites necesarios para la modificación del local.

Biólogos y especialistas del Jardín Botánico de la Fundación Miguel Lillo se sumaron al repudio de los ciudadanos con respecto a la tala del árbol. “Si bien el gomero no es una especie que puede ser plantada en veredas, es un referente muy valioso para los vecinos de la zona. Tiene casi 100 años y una belleza muy particular. Ahora quedó mutilado”, se lamentó Ana Levy, directora del jardín.

La bióloga piensa que Espacios Verdes tendría que ocuparse de cuestiones más ponderantes en la planificación urbanística ambiental. “Hay árboles muertos en toda esa zona que representan un peligro porque pueden caerse con una tormenta y matar a personas. Pero nunca los sacaron”, criticó.

La solución que no fue

Levy opinó que la solución del problema hubiera sido que la Municipalidad haya dialogado con los vecinos a través de una asamblea para tomar la decisión de la poda o erradicación del gomero. “De esa manera, se preparía al ciudadano y la decisión hubiera sido conjunta. Con sus pros y sus contras”, concluyó.

Monumento e histórico árbol

Miguel Mazzeo y Juan Bustamante
Aarquitectos- diseñadores del Monumento del Bicentenario


Como diseñadores del Monumento al Bicentenario nos sorprendimos al descubrir que se había iniciado luna poda y presunta extracción del histórico árbol de la esquina de Mate de Luna y pasaje Cervantes (frente mismo al monumento en construcción). Debemos aclarar que para proponer la ubicación del Monumento nos basamos primordialmente en el “entorno verde” del cual es parte fundamental ese enorme ejemplar. Resulta entonces de suma importancia conservarlo para obtener la armonía y el equilibrio natural/artificial proyectados para el conjunto. Consideramos absurda cualquier razón que se esgrimiera para justificar la extracción de dicho árbol. Por ello es que felicitamos a la Municipalidad de San Miguel de Tucumán por haber interpretado la relevancia del hecho, limitando a una poda y limpieza parcial las tareas. Esperamos sepan y puedan mantener esa postura en el tiempo.